Porque dentro de cada gran lata, además de buen producto, hay tradición, cultura, un paisaje y una filosofía, una historia que pasa de padres a hijos. Queremos poner en valor las conservas, como producto de calidad, una gastronomía primitiva a la vez que innovadora. Queremos acercar lo urbano a lo rural y lo rural a lo urbano, para hacer Mélida Wines más grande.

Las conservas han pasado a formar parte de la gastronomía gourmet y se han convertido en un bocado de lujo:
Sardinas, mejillones, anchoas, oricios, atún, caballa, ventresca, bonito, zamburiñas, almejas, berberechos, navajas, ostras, trucha, calamares, pulpo, bacalao…
Espárragos, puerros, alcachofas, cardo, pimientos, legumbres, mermeladas…
Patés, quesos, embutidos, escabeches, guisos……

Estos son algunos productos que “la latilla” o el concepto conserva, nos permite trasladar a los clientes de Mélida Wines. Y lo mejor de todo, ¡que puedes llevártelos a tu casa!